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Las cuatro vidas (o más) del neumático

La vida del neumático de un camión no finaliza cuando la profundidad de su dibujo mengua.

Optimizar las "vidas" del neumático es bueno para el medio ambiente y el bolsillo.
Optimizar las "vidas" del neumático es bueno para el medio ambiente y el bolsillo. / Redacción Ruta del Transporte
Silvio Pinto

06 de marzo 2023 - 18:37

La máxima rentabilidad de un neumático de camión se obtiene cuando conseguimos apurar, al menos, sus “cuatro vidas”, al margen del ahorro de combustible que haya proporcionado durante toda su vida útil. Y es que estos neumáticos, a diferencia de los de turismos o motocicletas, no se tiran cuando el dibujo de su banda de rodadura comienza a desvanecerse.

Precisamente unos kilómetros antes de que sus surcos desaparezcan podemos ver unos testigos de desgaste que nos indican que ha llegado el momento de su reesculturado. De esta manera, el neumático disfruta de una segunda vida cuando un taller autorizado reescribe su dibujo. Es algo más corta que la primera, pero más rentable como veremos después.

Cuando este segundo ciclo llega a su fin, comienza el “momento recauchutado”. En esta tercera vida se sustituye la banda de rodadura por una completamente nueva. Dependiendo de la técnica empleada en este proceso, podremos hablar de recauchutado en frío o caliente:

  • Recauchutado en frío, también llamado de curado previo. En este caso se sustituye la banda de rodadura por una nueva premoldeada y prevulcanizada, que se une a la carcasa mediante una fina capa de caucho que una vez vulcanizado actúa como adhesivo.
  • Recauchutado en caliente o curado por molde. En el proceso de curado por molde se aplica caucho no vulcanizado al neumático previamente pulido y se coloca en un molde, como si de uno nuevo se tratara. Serán pequeños detalles los que nos hagan diferenciarlo de un neumático nuevo, como un color más oscuro de la nueva banda de rodadura o en algunos casos alguna "cicatriz" en la zona de unión de ésta con la carcasa.

Hay que tener en cuenta que un neumático recauchutado solo se podrá montar en un eje motriz o en un remolque/semirremolque (nunca en el eje direccional). Uno reesculturado no tiene estas limitaciones.

El reesculturado (coloquialmente llamado "rayado") de un neumático consiste en hacer más profundo el dibujo de la banda de rodadura mediante (tradicionalmente) unas cuchillas calientes que retiran parte de la goma existente en las ranuras de la mencionada banda de rodadura.

Este proceso, que suele llevarse a cabo cuando la profundidad del dibujo ronda los 3 mm (milímetro arriba o abajo según el fabricante), es especialmente recomendable, porque el momento en el que se lleva a efecto el neumático ofrece menos resistencia a la rodadura que nuevo, aportando unas decenas de miles de kilómetros adicionales en los que notaremos una reducción de consumo de combustible.

El "rayado" también se puede llevar a cabo en un neumático recauchutado (es la cuarta vida). No olvidemos que para que un neumático pueda ser recauchutado ha de contar con una carcasa en perfectas condiciones, de la misma manera que un desgaste irregular afectará negativamente a la posibilidad de llevar a cabo un buen reesculturado.

Para confirmar que el estado de la carcasa admite un recauchutado, ésta será inspeccionada en detalle por el recauchutador. Por lo tanto es extremadamente importante cuidar de los neumáticos durante toda su vida útil. En determinadas circunstancias, una carcasa que no haya sido sometida a mucho estrés ni haya sufrido ningún “percance” de importancia podría llegar a ser recauchutada por segunda vez.

Para finalizar, y a modo de curiosidad, hay que tener presente que los neumáticos que se monten en un mismo eje tienen que haber sido recauchutados por el mismo recauchutador, pudiendo ser la carcasa de diferente fabricante.

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