¿Cómo evitar la “cubanización” de las flotas?

“Si el Estado no actúa, tendremos una flota cubana", aseguraba recientemente Alexander Vlaskamp, director del fabricante de camiones MAN, en una publicación alemana. En mi opinión, debió decir “si el Estado no deja de intervenir”, pero bueno, el hecho es que el envejecimiento del parque de camiones del país germano es un hecho preocupante y extrapolable al de sus aviones e, incluso, al de sus turismos, cuya edad media es de 10,3 años; más que nunca.

Pero no es un caso exclusivo de Alemania. El parque de vehículos mundial -incluyendo los industriales- está envejeciendo peligrosamente. En Europa un camión medio lleva en funcionamiento 14,3 años. Una cifra que España supera con una edad media de 14,8 años en camiones rígidos, un aumento significativo desde los 5,9 años que registraban en 2007 (las tractoras tienen una edad media de 8,1 años, muy superior a los 4,7 años de 2007).

Algo similar ocurre con nuestros automóviles, que en 2023 alcanzaron una edad media de 14,2 años; es decir, uno de cada dos vehículos que circula por nuestras carreteras tiene más de 15 años.

Un camión Euro 6d emite hasta un 70% menos de óxido nitroso y un 30% menos de CO2 en comparación con un camión de 14 años de antigüedad

La progresiva “cubanización” de nuestro parque de camiones es una muy mala noticia para la eficiencia, para la seguridad vial y también para la reducción de emisiones (un camión Euro 6d emite hasta un 70% menos de óxido nitroso y un 30% menos de CO2 en comparación con un camión de 14 años de antigüedad).

LAS FLOTAS DE TRANSPORTE NO SE RENUEVAN

Las flotas, en nuestro país y en el resto del mundo, no se renueva por problemas de eficiencia, rentabilidad y falta de seguridad jurídica. Este último punto es clave. ¿Cómo vamos a obligar a una empresa transportista -sobre todo si es una pyme, como es el caso de la mayoría- a renovar sus camiones si los cambios normativos son constantes en temas tan determinantes en su estructura de costes como el energético?

Desde que en 2021 el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible activó el Plan Moves Mitma (400 millones de euros a cargo de los fondos europeos y 50 millones a cargo del Ministerio liderado por Óscar Puente) les hemos trasladado en varias ocasiones la urgente necesidad de mejorar la eficiencia de este programa, cuyo objetivo es impulsar la renovación de las flotas del transporte profesional por carretera, tanto de mercancías como de viajeros. Algo que no se está logrando pues gran parte de este presupuesto se ha destinado a achatarramiento y no a la adquisición de vehículos considerados por el Gobierno “cero emisiones” (vehículos híbridos, híbridos enchufables, de hidrógeno o eléctricos).

¿Cómo vamos a obligar a una empresa transportista -sobre todo si es una pyme, como es el caso de la mayoría- a renovar sus camiones si los cambios normativos son constantes en temas tan determinantes en su estructura de costes como el energético?

Estas subvenciones serían mucho más efectivas si se concedieran en forma de descuento directo en el momento de la adquisición del vehículo y no como una ayuda que las empresas de transporte tardan en recibir hasta dos años. También debería de incentivarse la compra de los camiones propulsados por gas natural -al igual que el Plan Moves Mitma ya contempla ayudas para los autobuses a gas- y por combustibles tradicionales (tanto de origen fósil como sintéticos renovables) ya que rejuvenecer el parque rodante actual supone ya de por sí una reducción significativa entorno al 20% del consumo energético y, por tanto, de las emisiones de CO2; además, de la mejora en seguridad vial activa y pasiva que suponen los avances técnicos que en ese campo tienen los vehículos modernos.

Pese a la contumacia de los legisladores, la electromovilidad no parece una opción alcanzable en el caso de los camiones. En todo 2024, sólo el 0,77% de los camiones matriculados en España han sido eléctricos, en concreto 429 vehículos de un total de 32.140 unidades matriculadas del mercado de industriales. Una “foto” similar obtenemos en la UE, donde sólo el 0,1% de los vehículos pesados es eléctrico. Con más de seis millones de vehículos medios y pesados circulando por el Bloque de los 27 y alrededor de 300.000 vehículos puestos en servicio cada año, se necesitarían dos décadas para renovar las flotas actuales. Algo que no puede abordarse exclusivamente con la electrificación del parque actual de camiones, que aún está lejos de las previsiones más optimistas.

Pese a la contumacia de los legisladores, la electromovilidad no parece una opción alcanzable en el caso de los camiones

El transporte pesado por carretera es una parte esencial de la economía española. En nuestro país, el 96% de las mercancías se mueven por carretera (muy por encima de la media europea, del 77%), por lo que reducir las emisiones de CO2 de este sector es clave para cumplir con los objetivos de descarbonización. Con más de 100.000 empresas y 500.000 empleos directos, las empresas de transporte de nuestro país se enfrentan a la mayor transformación de su historia. Una transformación sin precedentes para la que necesitamos el apoyo de la Administración.