Conductores extranjeros se rebelan contra los abusos de transportistas en Europa

Decenas de camioneros, mayoritariamente de países asiáticos, llevan semanas en huelga en un área de servicio alemana para protestar por las condiciones laborales a las que les someten empresas transportistas en Europa del Este. En concreto, se manifiestan porque los operadores polacos para las que trabajan llevan meses sin pagarles.

La Organización Internacional del Transporte por Carretera (IRU) ha expresado este viernes su solidaridad con estos conductores profesionales que se concentran en el estacionamiento de Gräfenhausen-West al sur de Frankfurt, y pide "la aplicación del Estado de derecho y la colaboración entre las partes interesadas para evitar abusos similares en el futuro", que condena enérgicamente. La asociación internacional explica que muchos de los conductores son ciudadanos de fuera de la UE, de países asiáticos.

En palabras de la directora de IRU para la Unión Europea, Raluca Marian: "Esta es una situación espantosa. Estos conductores deben ser tratados con respeto y remunerados por su trabajo, como se establece contractualmente y dentro de la ley. Todos los operadores de transporte por carretera deben respetar el Estado de derecho. Cualquier infracción o actividad ilegal debe ser sancionada por las autoridades correspondientes".

Y es que el presidente de la asociación de transportistas alemanes BGL, Dirk Engelhardt, vincula estos abusos laborales a practicas desleales por parte de algunos transportistas europeos: "Incidentes como el que se ve ahora en Gräfenhausen muestran claramente que, a pesar de los esfuerzos de mejora como el Paquete de Movilidad, las prácticas desleales que distorsionan el mercado siguen siendo una realidad en el transporte de mercancías por carretera".

"Destruye el mercado"

"Estas prácticas ponen en peligro el sustento de los conductores y sus familias, pero también destruyen los mercados para la gran mayoría de las empresas respetuosas de la ley en el transporte de mercancías por carretera que ofrecen condiciones justas a sus conductores", abunda Engelhardt. BGL se compromete a trabajar con el resto de asociaciones de transportistas y con sindicatos.

La polaca ZMPD, asociada a IRU, espera que este "incidente" sea aclarado por las autoridades competentes. Su presidente Jan Buczek, asegura que "cualquier signo de competencia desleal, incluidas las irregularidades relacionadas con el pago del salario, debe evaluarse y abordarse cuidadosamente".