Los repartidores de butano acuerdan un paro de ocho días no consecutivos en noviembre y diciembre

Los distribuidores de gases licuados del petróleo no repartirán a domicilio durante ocho días no consecutivos de noviembre y diciembre. Estos transportistas exigen una actualización de los precios que perciben por el reparto de bombonas. Culpan de ello a los operadores petroleros y al Ministerio para la Transición Ecológica y aseguran que, en ocasiones, trabajan a pérdidas.

Con estas reivindicaciones, la Federación Española de Distribuidores de Gases Licuados del Petróleo (Fedglp) ha celebrado este lunes una asamblea en la que ha aprobado por unanimidad la suspensión temporal del servicio de reparto domiciliario de bombonas de butano. Los días de paros serán el 5, 13, 21 y 29 de noviembre y 5, 11, 17, 23 de diciembre.

Durante el periodo de suspensión, las agencias de distribución no realizarán entregas domiciliarias a particulares ni a empresas, aunque seguirán garantizando el suministro a los puntos de venta. Asimismo, esta suspensión no afectará a usuarios en situación de vulnerabilidad social, centros educativos, sanitarios, de atención social, residencias de mayores, ni a instituciones sin ánimo de lucro.

Reivindicaciones

Esta federación asegura que si han llegado a convocar paros es por "la falta de respuesta por parte de las autoridades y de los operadores, con un sistema de actualización de la retribución que lleva más de una década sin actualizarse". En concreto exigen la modificación y actualización de la ley que marca el sistema de determinación automática de precios máximos de venta, antes de impuestos, de los gases licuados del petróleo envasados. Y, a los operadores petroleros les piden "una actualización justa y adecuada".