Transportistas europeos advierten del "caos" de la nueva norma del tacógrafo
El sector se muestra especialmente preocupado por la obligación de registrar los países que atraviesan cada vez que cruzan una frontera.
A partir del 2 de febrero, los camioneros europeos tendrán que anotar en el tacógrafo los países que atraviesen en sus rutas. Es una de las normativas del nuevo manual del tacógrafo que más dudas ha generado. La patronal del transporte en Países Bajos, Transport en Logistiek Nederland (TLN), cree que este punto concreto generará "caos en las fronteras, emisiones adicionales de CO2 y costes más altos".
Las organizaciones empresariales españolas tampoco tienen muy claro cómo deben actuar los transportistas cuando entren en un nuevo país. El Comité Nacional del Transporte por Carretera se ha reunido este martes con la Inspección de Transporte Terrestre para tratar sus dudas sobre las nuevas normas del tacógrafo. A pesar de que la Subdirección del Mitma ha contestado sus preguntas, el Comité ha entendido "que no se tiene aún muy clara la aplicación de estas cuestiones, por lo que se ha planteado hacer una comunicación a la Comisión Europea, para que esta lo aclare al ser su competencia".
Esta obligación se deriva del Paquete de Movilidad de la Unión Europea. La organización holandesa TLN asegura que la operación dura unos cinco minutos. El conductor deberá hacerlo manualmente si el tacógrafo no lo registra de forma automático. Debe hacerlo en la primera parada del conductor, lo más cercano posible a la frontera del nuevo Estado miembro al que ha entrado. Si el cruce de frontera se produjera al viajar en un ferry o tren, el conductor deberá anotarlo en el puerto o estación de llegada.
"Esto puede generar caos e inseguridad en el tráfico en las fronteras", según TLN: "Aproximadamente 96.000 camiones cruzan la frontera holandesa todos los días. Si se paran en la frontera o en el primer lugar de descanso o gasolinera que encuentren, los pocos espacios de estacionamiento que hay se colapsarán en poco tiempo.
Los transportistas holandeses también se quejan de los riesgos de accidente y de las emisiones de CO2 innecesarias que, a su juicio, esta norma generará.
Contra las empresas buzón
A pesar de las quejas de TLN, cuando se conoció el Paquete de Movilidad, algunas organizaciones como Fenadismer destacaron que estas medidas tienen el objetivo de luchar contra las empresas buzón -aquellas radicadas en países diferentes en los que operan-. Y en concreto contra las transportistas de Europa del Este que aprovechan las peores condiciones laborales de sus países para contratar a camioneros que trabajan en países de la Europa occidental.
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