Iberdrola desarrolla el primer Corredor Mediterráneo eléctrico para transporte pesado
La iniciativa, en la que también trabajan Disfrimur e Ingeteam, cubrirá más de 450 kilómetros entre la Región de Murcia y la Comunidad Valenciana.
Iberdrola, Disfrimur y la empresa especializada en electrónica de potencia Ingeteam trabajan por el primer Corredor Mediterráneo eléctrico para transporte pesado totalmente eléctrico. Se tratará de un recorrido de más de 450 kilómetros que discurrirán por la Región de Murcia y la Comunidad Valenciana, aunque el objetivo de sus promotores incluye su extensión al resto de corredores de mercancías del país en próximos años.
Parte del proyecto se basa en la adquisición de camiones pesados de hasta 40 toneladas eléctricos. También desarrollarán una infraestructura de recarga pública, tanto en las bases logísticas de Disfrimur -abiertos también a uso público-, como en otras estaciones dotadas de cargadores de muy alta potencia para el trayecto interurbano. Por último, la iniciativa desplegará una red eléctrica inteligente para dar servicio a estos cargadores, asegurando la máxima eficiencia.
Las estaciones de recarga eléctrica se situarían en los centros logísticos de Disfrimur en Sangonera La Seca (Murcia) y San Isidro (Alicante). Posteriormente, el primer Corredor Mediterráneo eléctrico continuaría su desarrollo con el despliegue de cargadores en ruta y en otras bases logísticas de Disfrimur, cubriendo la totalidad del trayecto Benicarló (Castellón) – Puerto Lumbreras (Murcia).
Cargadores de muy alta potencia
Iberdrola destaca que la iniciativa es pionera también en el desarrollo y uso de cargadores eléctricos de muy alta potencia, de hasta 1 MW, una tecnología en proceso de estandarización. El desarrollo de este punto de recarga seguirá el futuro estándar MCS (Megawatt Charging System), orientado a la carga rápida de vehículos pesados, como camiones o autobuses. Con ello, se podrán cargar vehículos con baterías de 200-600 kWh de capacidad en 20-30 minutos. Para ello se elevará la tensión de carga hasta 1.500V y corriente de más de 1.000A.
Este tipo de infraestructura permitirá velocidades de recarga en ruta muy elevadas, imprescindibles para la electrificación del transporte de mercancías de larga distancia o para servicios de distribución de mercancías 24/7.
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