Las autoridades belgas han detenido este lunes a cinco personas, dos de ellas menores de edad, por su relación con la muerte de Gheorghe Tibil, un conductor profesional de camión que murió en la madrugada de este sábado en Bélgica cuando le arrojaron una tapa de alcantarilla a su camión desde un puente.

La tapa, de 20 kilos, atravesó el parabrisas y el conductor murió en el acto. Su esposa, que había empezado a trabajar hace unos meses como segunda conductora, estaba durmiendo a su lado y no resultó herida. De hecho, logró hacerse con el control del vehículo tirando del freno de mano, según ha detallado la agencia Efe. Tibil, de 50 años, nacionalidad rumana y empleado de la empresa alicantina Castillo Trans, circulaba en dirección hacia Francia por la carretera E42 en la provincia de Lieja, en el sureste de Bélgica, cuando se produjo el fatal incidente, que la Fiscalía trata como asesinato. 

La fiscal Régine Cornet destaca, en declaraciones recogidas por Efe, que se trata de un acto deliberado: "Cuando se arroja una tapa de alcantarilla de 20 kilos desde un puente, lo único que se consigue es matar".

Castillo Trans ha expresado en un comunicado su "inmenso dolor por la pérdida": "A ese dolor se une un sentimiento de impotencia y rabia al saber por las autoridades que su fallecimiento ha sido provocado por el lanzamiento de una tapa de alcantarillado desde un puente, a su paso por la autopista cuando circulaba por Bélgica. La necia acción ha quitado la vida a una buena persona, un gran profesional y ha dejado rota a toda una familia".

La empresa transportista asegura que ha puesto todos sus medios para localizar a los causantes "y que posteriormente la familia tenga las herramientas para que se les responsabilice por estos hechos".

Solidaridad de las asociaciones

Importantes asociaciones españolas del transporte han tenido conocimiento de este hecho y han expresado su pésame y su condena. CETM, la principal patronal del transporte en España, espera "que las autoridades belgas investiguen los hechos y encuentren a los responsables de su muerte. Un crimen así no puede quedar impune, por lo que confiamos en que se haga justicia". 

Fenadismer, que representa a autónomos y pymes del sector, denuncia que "estos hechos homicidas se están reproduciendo, sobre todo en Bélgica y en Francia".