El Grupo Zoilo Ríos recibe la acreditación de que toda la energía que consume es renovable
La empresa aragonesa ha consolidado en los últimos meses su apuesta por la movilidad sostenible y las energías limpias y renovables.
Además de recibir recientemente la acreditación de la compañía comercializadora de energía verde Syder que corrobora que en 2019 toda la energía consumida por el operador integral de servicios energéticos y
complementarios aragonés fue de origen renovable, el Grupo Zoilo Ríos sigue ampliando su red de
cargadores para vehículos eléctricos.
Así, a los 13 cargadores ya en servicio -diez supercargadores Tesla de 150 kilovatios (kW) en la Estación de Servicio El Cisne (Autovía de Madrid, Zaragoza) y tres de carga rápida de 50 kW y moderada de 43,5 kW en las Estaciones de Servicio El Portazgo y Los Ibones, en ambos márgenes de la Autovía de Logroño a la salida y entrada de Zaragoza y en la Estación de Servicio de Rincón de la Barca (Caspe, Zaragoza)- se unirá en breve otro más que ya está en proceso de instalación en la Estación de Servicio El Sisallar (Binéfar, Huesca).
El objetivo del Grupo es seguir extendiendo esta red de cargadores instalando otros siete a corto y medio plazo en distintos puntos de su red de estaciones de servicio. Se tratará en todos los casos de equipos dotados de la última tecnología que permiten recargas en un corto espacio de tiempo, lo que acerca la movilidad eléctrica a las necesidades de la mayor parte de los usuarios habituales, sean profesionales o particulares, explican desde la empresa.
Esta iniciativa se enmarca en el plan estratégico de la compañía, que contempla la progresiva incorporación del suministro de energías bajas en carbono y procedentes de la economía circular, como la electricidad de origen renovable, el hidrógeno o el biometano.
El Grupo Zoilo Ríos ha puesto en marcha distintas acciones para reducir el impacto de su propia huella de carbono y la de sus clientes, entre las que se encuentran sus proyectos de medición, reducción y compensación de emisiones, sustitución de los derivados del petróleo de sus estaciones de servicio por otras formas de energías para la movilidad con menos impacto en el planeta, compra del 100% de electricidad verde, reciclaje de agua en lavaderos, recogida de aceite usado, adquisición de vehículos con bajas emisiones y eléctricos para la flota de empresa, acciones de reforestación o construcción de instalaciones de solar térmica y fotovoltaica para autoconsumo.
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