A pesar de los avances continuos en el sector del transporte y la movilidad, uno de los mayores desafíos pendientes es garantizar una conducción segura en condiciones climáticas adversas como las que asolan España este mes de marzo. Según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), las condiciones meteorológicas adversas, como la lluvia, la niebla y el viento fuerte, aumentan significativamente el riesgo de sufrir un accidente de tráfico en España. Factores como la reducción de la capacidad de frenado, el empañamiento de las lunas y la disminución de la estabilidad del vehículo contribuyen a este peligro. En particular, la DGT señala que la lluvia es uno de los factores más peligrosos, ya que reduce la adherencia del neumático a la carretera y aumenta la distancia de frenado.
Conducir bajo condiciones de lluvia requiere precauciones adicionales para garantizar la seguridad vial. En este contexto, Geotab ha recopilado cuatro situaciones comunes en momentos de lluvia intensa y cómo actuar:
- Aquaplaning: este fenómeno ocurre cuando los neumáticos pierden contacto con la carretera debido a una capa de agua, lo que provoca la pérdida de control del vehículo. Para minimizar este riesgo es recomendable disminuir la velocidad, lo que facilita que los neumáticos mantengan el contacto con la carretera y reduce la posibilidad de aquaplaning. Además, realizar movimientos suaves y evitar frenazos o giros repentinos ayuda a mantener la estabilidad del vehículo en condiciones de lluvia, algo que muchos españoles han puesto en práctica este mes de marzo. Sin embargo, según el estudio de datos analíticos de Geotab, los frenazos bruscos han aumentado el 19% en lo que va de marzo, frente al mismo periodo del mes de enero.
- Carreteras resbaladizas: la lluvia puede reducir la adherencia de los neumáticos al asfalto, aumentando la distancia de frenado y el riesgo de deslizamiento. Para conducir de manera segura en estas condiciones hay que mantener una mayor distancia con el vehículo precedente proporcionando más tiempo de reacción ante cualquier imprevisto. También es recomendable una conducción suave, evitando cambios repentinos de velocidad. A pesar de esto, según el análisis de Geotab, las maniobras bruscas han aumentado este mes lluvioso un 14% desde el primer mes de 2025.
- Acumulación de agua: los charcos profundos pueden provocar pérdida de control del vehículo o daños mecánicos. Detectar los charcos con anticipación y evaluar su profundidad antes de atravesarlos o evitarlos es fundamental para mantener el control del vehículo. Además, en condiciones de lluvia intensa, planificar la ruta para evitar zonas propensas a inundaciones es una medida preventiva muy eficaz.
- Visibilidad reducida: la lluvia disminuye la visibilidad, aumentando el riesgo de accidentes. Encender las luces de cruce mejora la visibilidad y permite ser visto por otros conductores. En casos de lluvia intensa, es aconsejable activar también las luces antiniebla traseras, recordando apagarlas cuando mejore la visibilidad. Si el campo de visión se reduce considerablemente debido a la lluvia intensa, es aconsejable detenerse en un lugar seguro fuera de la calzada hasta que las condiciones mejoren.
Los accidentes de tráfico tienen también un coste económico: según la Fundación para la Seguridad Vial (Fesvial), representan unos 2.000 millones de euros anuales en costes directos en España. Geotab ha lanzado su herramienta 'Análisis de riesgos en la conducción', que utiliza inteligencia artificial ofreciendo evaluaciones del riesgo basadas en datos. Esta información permite a los gestores de flotas implementar medidas de seguridad específicas.